Hoy desperté de madrugada, tal como lo recomienda Marco Aurelio en sus Meditaciones; me desperecé, abrí mucho mi tierno hociquito, me dí unos cuantos lengüetazos en la cara para tener una buena apariencia, me puse mi bata de seda color verde, bajé las escaleras y me introduje a la cocina. Mi gordis había desayunado ya, me dijo que había pasado la noche pensando sobre los cínicos y que la utilización del término para calificar a los desvergonzados, sinvergüenzas y descarados está mal aplicada puesto que el Cinismo es una escuela filosófica que sólo pretendía que los humanos regresaran a la vida natural, que no hubiese abusos ni comportamientos encubiertos. Yo asentí con un leve maullido y esperé a que la gordis sirviese mi desayuno.
Cuando hube terminado mi alimentación matutina, propuse a mi gordis intentar la planificación del día y, como primer punto, expresé mi inquietud principal: ¿quién fue el primer filósofo del mundo?
La historia del pensamiento data de muchos años atrás, son asombrosos los pasos agigantados que dio la humanidad en su desarrollo.
Recordemos que la historia del pensamiento proviene del viejo mundo, esto se debe a que en esos lares aparecieron los primeros humanos, según lo encontrado hasta ahora por los arqueólogos y de ahí son, también, los vestigios de escritura que nos indican la comunicación oral de los pobladores antiguos.
En respuesta a una solicitud expresa de nuestro queridísimo sir Gerald, abordaré temas que nos apasionan e invitan a buscar información para intentar acrecentar nuestro bagaje de conocimientos que, lo sé bien, nunca estarán acabados.
Antes de comenzar con mi descubrimiento, quiero aclarar que el humano y los felinos tenemos mucho en común, por ejemplo, la curiosidad, la inquietud y la vocación de investigación continua.
Tales de Mileto (Mileto, actual Turquía, 624 a.C. - 548 a.C.), considerado el Padre de la Filosofía, no se conformó con las explicaciones brindadas por los relatos mitológicos sobre los fenómenos naturales.
A las explicaciones que atribuían a la voluntad de deidades todos los hechos naturales; él, utilizando la racionalidad, sostuvo que todo se debía a un arjé o principio común que origina la existencia de la naturaleza y sus cambios, incluyendo hechos inesperados.
Tales de Mileto localizó el arjé en el agua porque el líquido se encuentra en la mayor parte de las cosas de la naturaleza, al evaporarse se convierte en gas, se mezcla con el aire y permea todo lo que existe.
Las aportaciones de Tales de Mileto fueron vastas, pues incursionó en el estudio de la astronomía (antes llamada astrosofía) y en la geometría, entre otros campos del conocimiento.
Bueno, yo me siento agradecido porque hoy aprendí una palabra nueva “arjé”, porque conocí la biografía del primer filósofo, porque hice algo productivo para mí y porque concluyo que gatos y humanos somos familiares que compartimos características de gatonalidad… ¡MIAU!
No hay comentarios:
Publicar un comentario